Lo que resulta muy curioso es que si se realizan encuestas sobre cual es el empleo más sobreextendido en el Metaverso las cifras sobre las escorts serán aplastantes. Por supuesto, el sexo virtual pago provoca un tipo de dinamismo cultural muy distinto a RL. Si bien ya conocemos las noticias sobre los grupos cristianos que trabajan en Second Life para revertir esta situación, lo cierto es que en este mundo virtual las escorts gozan de un creciente prestigio. Y como en ningún otro caso reina la xenofobia, no sólo orientada a el origen de los clientes en RL, sino en el tipo de avatar-cliente. Un síntoma pare seguir estudiando.